Recoja varias piedras pequeñas de diferentes colores. Si es posible, escoja algunas piedras en la playa, en ríos, algunas en el desierto y algunas en la montaña. Todo esto no es necesario , pero potenciara su trabajo por supuesto, si por alguna razón no puedes juntar piedras de diferentes zonas entonces utilice las piedras que pueda encontrar cerca del lugar en donde vive o trabaja.
Consiga una vasija, una jarra o cualquier otro recipiente de barro. Necesitará suficientes piedras para llenarlo. Mantenga una piedra en su mano de proyección. Visualice la piedra emitiendo energías protectoras. Al tiempo que visualiza, diga estas o similares palabras:
Piedra de la montaña, piedra del pozo, piedra del desierto, ¡cargad ahora mi hechizo! Ponga la piedra en el recipiente, diciendo estas o similares palabras:
En el recipiente pongo esta piedra para proteger mi fuego, mi casa, mi hogar.
Repita todo el procedimiento con cada piedra. Acabar de llenar el recipiente le llevará algún tiempo, dependiendo, por supuesto, del tamaño del mismo. Cuando el recipiente esté lleno, póngalo (sin taparlo) en algún lugar de su casa, mientras dice:
Recipiente de piedras, protege este lugar; ¡envía Todo mal lejos inmediatamente! Devuélvelo bajo el suelo; entiérralo; ¡Es su destino!