Esto ayudará a tener tu mente y pendientes más organizados, para ayudarnos a ser conscientes y así empezar con objetivos pequeños para lograr las metas, de esta forma veras que en poco tiempo tus objetivos serán más grandes y claros.
Necesitamos para este ritual:
Un calendario mensual grande, de no tenerlo con 12 hojas de papel indicando el mes y sus días, sera suficiente. En ellas escribiremos nuestros objetivos
Bolígrafos o colores, para ir diferenciando cada uno de tus objetivos, por ejemplo, de color rojo objetivos propios que nos van a dar fuerza, amarillo para tener el mayor éxito en esa tarea, azul para tener mejor claridad de ese objetivo, verde para materializar y asentar esa tarea.
Comienza por escribir lo que quieres realizar por mes, deben de ser objetivos cortos y alcanzables, incluso tareas diarias sencillas que muchas veces tenemos el propósito de hacerlo pero nunca lo llevamos a cabo, por ejemplo, arreglar nuestro closet, terminar de leer algún libro o contestar los correos pendientes, También puede ser ordenar algún área específica de tu casa, tirar o donar la ropa que ya no usas, etc
Una vez con todos los objetivos escritos, realiza una meditación corta de 3 a 5 min y pon un incienso o esencia que te de tranquilidad, a continuación procederás a leer cada uno de esos objetivos e iras dando prioridades en el mes para realizarlos. Respira y dale la importancia a cada uno, ya que por muy pequeño que sea es valioso para ti.
A continuación colócalos en un lugar visible, para que una vez que los hayas realizado puedas ir tachando lo que has logrado, de no haber cumplido con alguno, escribe a un lado de este que fue lo que te impidió hacerlo, para que posteriormente trabajes en esa barrera y de nuevo en consciencia analices que es lo que debes de hacer para tener éxito en cada uno de tus proyectos.